No quiero vivir en un mundo inventado
- Patricia, Patricia, Patricia...- . Repetía una y otra vez su nombre, ajeno a todo cuanto sucedía a mi alrededor.
Sentado sobre un viejo escalón de piedra. Una escalera compacta de piedra, de una antigua casa de piedra de muros recios, sin restaurar, con una chimenea barroca de piedra. Allí, encogido como si tuviese frío en un día en el que el sol era el protagonista indiscutible, intentaba apropiarme de una bocanada de aire fresco, puro, de alta montaña. Allí, rodeado de prados, rodeado de antiguos sabores, intentaba arrebatarle al tiempo ese momento de soledad, de silencio, que mi desolación necesitaba.
Mi mirada ausente se detuvo en el blasón ovalado de granito fino en el que un caballero de facciones serenas y ojos grandes y expresivos, montado sobre un corcel, lanceaba un león delante de un árbol. Se enfrentaba cara a cara a la adversidad, a su destino.
En ese momento me sorprendí pensando en mí mismo. Pensaba que mi vida no me pertenece de todo . Pensaba que cada uno es responsable de su propia felicidad, o ,como en este caso, de su propio infortunio. Somos nosotros mismos los que abrimos la puerta a la fatalidad.
- ¿Cómo seguir aparentando indiferencia?-. La respuesta no era sencilla. No quería enamorarme, porque eso significaría apartame del sentido común. Significaría entrar en un estado de dependencia, de necesidad, de locura, de sentimiento complicado.
- ¿Qué es lo que más desea un hombre atado a alguien a quien tiene que fingir que la quiere?. Desea cambiar su vida previsible, lineal, vacía. Desea rebelarse contra lo que le sucede. Desea salvarse.
Pero no. No quiero convertirme en amante. Entregarme a ella en las pocas horas que dispongo. No quiero vivir en un mundo inventado.
- Patricia, Patricia, Patricia... -. Sin ni siquiera percatarme seguía repitiendo su nombre. Deseando haberme fundido en sus brazos. Pero no, ya no podía regresar a la bodega.
5 comentarios
Desierto -
Enamorarse... necesitar, depender, enloquecer, sentir... se podrá evitar algo de ésto? Los sentimientos y la locura son inevitable pero... la dependencia? la necesidad?..... Ais... esas dos no me gustan ni un pelo.
Bueno, como ayer alguien me dijo... las hostias hay que sufrirlas cuando se las da uno/a, hacerlo antes es sumar angustia y sufrimiento que pueden terminar resultando innecesarios pero.. qué difícil es no hacerlo, niño... puta racionalidad de los cojones.....
En fin, un beso y algo de raciocinio aunque... regalártelo a ti.... va a ser peor el remedio que la enfermedad nuevamente.... jajaja.
_Mary_ -
Saludos amigo.
Brisa -
Sabes quién soy, no? -
Millones de besos para ti, encanto!
Te Adoro! Lo sabes, no?
Turandot -
Ads no creo que necesites consejos xDD
Saludos.